Los seres humanos podemos llegar a ser sumamente complicados en cuanto a nuestra conducta y manera de pensar, cada quien tiene su propia percepción de eso que llamamos "realidad", podemos coincidir en algunos aspectos de la vida, de lo que consideramos correcto o incorrecto, en todos sus sentidos, gracias a esa complejidad hemos dedicado como especie gran parte de nuestro tiempo en conocer, saber, crear o cambiar desde nuestro entorno hasta nosotros mismos en cuerpo y mente, con una diversidad de propósitos. Pero por encima de todos los resultados, acertados o no, me atrevo a decir que el fin primero ha sido poder facilitar nuestra existencia... individual o colectivamente.
Hoy día existe un gran conocimiento elaborado por las mentes y el arduo trabajo de investigación y experimentación de hombres y mujeres que en el pasado y en la actualidad han dedicado su vida para desarrollarlo a cambio de la satisfacción de "saber". Ese conocimiento se puede considerar como patrimonio de la humanidad, el cual con cada día que pasa se robustece, ampliándose y mejorando, y lo mejor de esto es que los "simples mortales" lo tenemos cada vez más asequible a través de los varios medios que utilizamos para comunicarnos.
Expuesto esto, no entiendo cómo hay personas, una gran mayoría que parece rehusarse a informarse, a saber como están las cosas hoy día, y como estarán dentro de pocos años, esa gente que sigue manteniendo como útil un pensamiento propio de la edad media, pienso que por esta misma gente no estamos más avanzados, o estancados en asuntos tan importantes como la salud, la educación, medio ambiente y política, no se puede tener un dialogo con el cual se puedan establecer métodos actualizados propios de nuestro tiempo, para aprovechar en su totalidad lo que ese gran conocimiento acumulado nos puede proveer.
Se sabe con seguridad como podríamos superar ciertas dificultades o problemas sociales, de carácter político, y de salud que quedarían superados si se tuviera la colaboración de cierto grupos influyentes en las decisiones mundiales.
Con un margen mínimo a equivocarnos sabemos que a futuro las cosas cambiaran para bien, logrando superar todos esos obstáculos que hoy nos impiden avanzar, lo que molesta es saber que hoy mismo ese cambio podría ser posible sino fuéramos tan estúpidos.